
El frasco será encerrado en cristal y colocado en el altar de una iglesia que abrirá sus puertas en mayo. Sionko dijo que la idea surgió del cardenal Stanislaw Dziwisz, arzobispo de Cracovia y viejo amigo y secretario del pontífice de origen polaco. «Él es de la opinión de que ésta es la reliquia más preciosa de Juan Pablo II y debería ser el punto focal de la iglesia», aseguró Sionko. La sangre se obtuvo de unas pruebas médicas a las que se sometió el Papa polaco en el Policlínico Gemelli de Roma, poco antes de su muerte el 2 de abril de 2005, y ahora está en posesión de Dziwisz. La iglesia es parte de un centro que se dedicará a cultivar la enseñanza del hijo más famoso de Polonia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario